Un cubano va caminando por el malecón habanero con un pollo bajo el brazo.
Una prostituta que lo ve pasar le grita:
"Oye tú, mi santo...te cambio ese pollo por este bollo."
El tipo, impasible y cabizbajo, sigue caminando sin hacerle caso.
La mujer se apresura y vuelve a gritar:
"Mi santo, ¿qué te pasa?¡Te cambio ese pollo por este bollo!"
El sujeto continúa caminando como si no fuera con él.
Entonces la mujer se apresura, lo pasa y lo encara diciéndole de nuevo:
"Bueno, mira tú...pero, ¿qué te pasa papi?
¿Por qué no me oyes? Te repito...te cambio ese pollo por este bollo!"
Al fin, el tipo levanta la cara y le dice:
"¡No me jodas mujer...qué bollo ni qué coño! ¡Yo acabo de dar el culo por este pollo!"
No hay comentarios.:
Publicar un comentario