Millonario en problemas judiciales en EU adopta a su novia como su hija

Internacional • 2 Febrero 2012 - 7:33pm — AFP

La estrategia del acusado, destinada a proteger su fortuna, fue valorada por los abogados del caso como "sin predecente", mientras el juez la calificó de "surrealista", reconociendo que deja a la Corte en un limbo legal.

Miami-Fort Lauderdale • El millonario fundador de un club de polo en Estados Unidos decidió adoptar a su novia como hija, para proteger su fortuna en un juicio al que se enfrenta por un accidente automovilístico en el que murió un joven de 23 años, informó la prensa local en Florida (sureste).

John Goodman adoptó legalmente en octubre del año pasado en el condado de Miami Dade a su novia desde 2009, Heather Laruso Hutchins, una atractiva rubia de 42 años, informaron documentos judiciales revelados por el diario online The Palm Beach Post.

Goodman, fundador del Club Internacional de Polo Palm Beach en Wellington, está demandado por Lili y William Wilson de muerte por negligencia por el accidente en el que murió su hijo de 23 años en febrero de 2010.

Según la policía de Palm Beach, el millonario no se detuvo en una señal de Pare, y, como resultado, su vehículo impactó con exceso de velocidad contra el que manejaba el joven fallecido. Otros reportes de canales locales indicaron que Goodman se dio a la fuga tras el choque.

Un juez de Palm Beach, Glenn Kelley, había determinado previamente que el fondo de herencia que había creado Goodman para sus dos hijos menores de edad no podía considerarse parte de la fortuna del millonario en caso de que el jurado concediera una indemnización a los Wilson.

Pero ahora que Hutchins es su hija adoptada tiene derecho a por lo menos un tercio de los activos de ese fondo y de esa forma Goodman cuenta con la protección de esos bienes antes que en marzo empiece un juicio civil en su contra. Además, la maniobra le permite contar con dinero en este momento en que sus propiedades están en la picota judicial .

La estrategia del acusado fue valorada por los abogados del caso como "sin predecente", mientras el juez Kelley la calificó de "surrealista", reconociendo que deja a la Corte en un limbo legal. Por ahora se espera que otra instancia judicial se pronuncie sobre la validez de esta jugada.