“LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA: MADRE POR EXCELENCIA”
Por Carlos Raudes
Ser mujer es un “privilegio que sólo Dios, como Hijo, puede regalarle a toda mujer, en este mundo”. Un papel que sobresale a todo “pensamiento mundano y todo sentimiento maléfico”, de cualquier ser humano.
Es muy triste que gran mayoría de las mujeres en la actualidad hayan “perdido el verdadero sentido de ser: MADRE Y ESPOSA”, a la vez, el “más bello y sublime regalo de Dios”, que en su creación, pudo regalarle “el sentido de la vida, a nosotros los humanos”.
No se puede ser “sólo esposa, ni tampoco se debe de ser sólo madre”, ambos papeles en cada una de las mujeres “van tomados de la mano y son un regalo y un privilegio que el Señor -como mujeres que somos-, nos ha regalado” y un papel que solamente “su inmenso amor –por el mismo que le tuvo a su Madre, la Santísima Virgen María, como mujer que era”, nos hizo hacer a nosotras, las mujeres, y, el que nos ha hecho desarrollar a la perfección” y que el mundo de hoy, “ha tratado de hacer desaparecer”, pero jamás lograrán destruir, porque en “CADA MUJER, ESTÁ REFLEJADA: LA OBRA DE DIOS”.
¡Alabo y bendigo al Señor!, por ese “PRIVILEGIO DE HABERME HECHO MUJER” y por haberme regalado como modelo de “MUJER”, a la “MÁS PERFECTA CREATURA DE ÉL: LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA”.
Como un regalo de amor a ustedes las mujeres, a las esposas de cada uno de ustedes, así como a las mamás –lo que todavía tiene el privilegio de tenerlas-, les envío esta “Catequésis de nuestro amado y recordado Santo Padre, S.S. Juan Pablo II”, “nacido de una mujer como también cada uno de nosotros: SALIMOS DEL VIENTRE GRANDIOSO: DE UNA MUJER”. ¡Alabado sea Jesucristo! y ¡Bendita tú, María, entre todas las mujeres!, ¡Amén!, ¡Amén!.
¡FELIZ Y GRANDIOSO DÍA DE LA MUJER!
Que el Señor las bendiga y la Santísima Virgen María, las cubra a todas con su santo manto.
Las amo muchísimo en Jesús y María,
DOLORES
“Mi vocación es el amor”
Sta. Teresita del Niño Jesús
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