NADA TE IMPIDE SER FELIZ.

La mayoría de la gente basa su felicidad en el futuro: “cuando tenga un buen trabajo voy a ser feliz”, “Cuando sea rico”, “Cuando encuentra alguien que me quiera”, “Mañana, mañana, mañana”. El mañana no existe y los deseos y las metas nunca se acaban.

El único momento que te pertenece es ahora mismo. Mientras lees este párrafo tienes muchas razones para ser feliz:

Puedes ver, eso es un milagro, puedes leer y aprender, eres inteligente y estás trabajando para superarte. La luz que te ilumina (natural o artificial) en este momento fue creada solamente para que puedas leer estos consejos que fueron hechos especialmente para ti. ¡Eres importante!.

…haz una lista de todas las razones que tienes en este preciso instante para ser feliz. Fìjate en todo: Tu familia, tu salud, la música, tus amigos, fijate hasta en los detalles más insignificantes.

Después de hacer tu lista…Hoy agradezco todas estas bendiciones. Cuento mis bienes no mis males.

Reflexiona en lo siguiente:

Esta es tu única oportunidad de ser tu mismo. Aprovéchala y sé feliz.

La vida es demasiado corta para estar triste…o preocupado o molesto o insatisfecho o frustrado.

El mañana es un cheque posfechado. El hoy es dinero en efectivo.

Cuenta lo bueno que tienes no tus problemas.

Vive sólo el día de hoy.

Resuelve tus problemas como se te vayan presentando. Pon toda tu atención en uno de ellos y después pasa al siguiente.

Busca siempre algo en qué estar ocupado.

Sé tu mismo, no imites a los demás.

Haz un amigo nuevo, recupera uno que hayas perdido.

Ten siempre la disposición de disfrutar cada momento.

Busca lo gracioso de todas las situaciones buenas y malas.

Ríe abiertamente y ten sentido del humor.

No permitas que los demás te contagien lo negativo.

Inspira confianza a los demás y aliéntalos.

No dejes para mañana el amor que puedas hacer hoy.

Pon todo tu entusiasmo en tu trabajo. Disfruta de lo que haces, después de todo, es a lo que dedicas la mayor parte de tu tiempo.

Pasa más momentos de calidad con tu familia y seres queridos.

No veas tantas telenovelas y, si lo haces, fíjate en lo bueno (si es que lo encuentras).

El rencor es de los peores sentimientos, es estar recordando una ofensa que te hicieron en el pasado, mejor perdona y olvida.

La preocupación es sentirse mal por algo que todavía no sucede y puede que no suceda siguiera. ¡Que tonto! ¿no?

No te tomes tan en serio, aprende a reírte de ti mismo.

Piensa positivamente.

Actúa con alegría y te sentirás feliz.

Al despertarte cada día proponte hacer un esfuerzo por ser feliz, piensa en algo que te gusta y disponte a disfrutar de un nuevo día.

No dejes que las cosas sin importancia perturben tu bienestar. ¡Vas a permitir que una pequeñez te robe el derecho de disfrutar cada instante de tu vida?

Ten paciencia para aceptar lo que no se puede cambiar, valor para cambiar lo que sí se puede y sabiduría para notar la diferencia.

Trata de adaptarte a las cosas y no esperes que los demás o las circunstancias se adapten a ti.

Deja de pensar en lo que no tienes, mejor piensa en lo que puedes hacer con lo que tienes.

Pues bien, si lo único que te pertenece en este momento, ¿por qué no te propones ser feliz hoy?

Sólo por hoy ten pensamientos alegres todo el día, perdona y ayuda a alguien que lo necesite, acéptate como eres y acepta a los demás, aprovecha tus bienes. En realidad…

¡NADA TE IMPIDE SER FELIZ!”