sábado, marzo 06, 2010

CARTA A DON DANIEL

Estimado Señor Presidente, casi en todos los países del mundo, las personas desean vivir en DEMOCRACIA REAL, no fingida. La democracia, permite libertad de pensamiento, libertad de movilización, libertad de expresión, libertad de opinión sin temor, derecho a la propiedad, en fin, libertad.

En Nicaragua así queremos vivir. Que le hace pensar a usted que debe seguir como presidente, violando la constitución.? En los años 80, cuando fue presidente con su partido, todo fue un desastre que hasta tuvo que adelantar las elecciones. Vino una guerra provocada por que usted y su partido cambiaron las reglas del juego que habían prometido antes de tomar el poder. El País quedo desbastado y desgastado, con miles en el cementerio y otros miles mutilados que aun pululan por las calles de Nic. Si en el 89 ustedes no ceden y dan elecciones, ninguno estuviera mandando en este país, posiblemente estuvieran exiliados o muertos, como les paso a los somozas y los somocistas. Lo recuerda?

Don Daniel, esto es lo que quiere para Nicaragua y su partido? La obsesión de poder y de riquezas, ciega al punto que no pueden ver mas allá de sus narices y de la adulación de los serviles, Recordemos la historia; Hitler, Mussolini, perón, rojas pinilla, marcos, los somozas, solo para recordar algunos. Eso me parece que no debería ser agradable, pues en una guerra todo el mundo pierde, pero más, los que están en el poder.

No todos los Dictadores tienen la suerte de Fidel Castro que lleva más de 50 años desbaratando al paraíso cubano. Pero todo tiene su final.

Recapacite Don Daniel, no le haga caso a los serviles que le pintan todo color chicha. Esos, no toman un arma para defenderlo, esos se marchan cuando ven que todo esta perdido, estos como los perros, olfatean al peligro y se ponen a salvo para disfrutar todo lo que han logrado a costillas del caudillo.

Recapacite don Daniel, piense en sus hijos, en su familia, en su partido que lo dejara destrozado, en Nicaragua, si es que le tiene algo de piedad a la tierra que lo vio nacer, piénselo antes que sea tarde.

No soy su amigo ni enemigo, solo un hombre sin partido que quiere libertad.

Edgardo Jiménez López

No hay comentarios.: