Día de la Madre en Nicaragua
Martín Maltez Rivas
El autor es abogado y notario público.
En nuestro país el Día de la Madre desde hace muchos años se celebra el 30 de mayo de cada año, como fecha en que le brindamos homenaje a ese ser desinteresado y tan amoroso que nos dio la vida, como es la madre.
Muchos sabemos que le rendimos homenaje en esta fecha, pero pocos conocemos por qué la celebramos ese día. Debemos remontarnos a inicios de la década de los años cuarenta, cuando era Presidente de la República Anastasio Somoza García.
El 30 de mayo era el cumpleaños de doña Casimira Sacasa de Debayle, madre de doña Salvadora Debayle, por consiguiente suegra de Somoza García. Dicen los historiadores que se sugirió esa fecha para que Somoza se congraciara con doña Casimira. Pero esta fecha fue debidamente aprobada mediante Decreto Legislativo Número 69, del 29 de mayo de 1940, publicado en La Gaceta en su edición número 148 de ese año. Entre otras cosas, el Decreto y su Reglamento aprobado un año después, establecían que había que honrar a las madres nicaragüenses de diversas maneras, sobre todo en las escuelas, y mandaban a hacer un Comité de Maestros y Educandos para la confección de “canastillas cunas” que debían entregarse en las distintas casas de maternidad.
Posteriormente, la Resolución Legislativa Número 69 aprobada el 23 de mayo de 1956, en su artículo primero ratifica como el 30 de mayo de todos los años la designación de esa fecha para celebrar a la madre nicaragüense, y mandaba en su artículo 3 que en los actos organizados en los colegios, los niños entregaran una flor roja a su madre y le dieran un beso en la frente. Pero varios años después, esa fecha se cambió. De acuerdo a la Ley 589 del 29 de noviembre de 1976, publicada en La Gaceta número 72 del 26 de marzo de 1977, se declara que el “Día de la Madre Nicaragüense”, debía celebrarse el último domingo del mes de mayo de cada año. Esto en la práctica casi no se cumplió y duró muy poco. Ya en ese tiempo el Presidente de la República era Anastasio Somoza Debayle.
El 24 de mayo de 1980, de acuerdo al Decreto 430 publicado en La Gaceta número 128 del 7 de junio de ese mismo año, la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional decreta que nuevamente a la madre nicaragüense se le rendirá homenaje el 30 de mayo de cada año. Y hasta la fecha nuestra tradición la ha seguido celebrando ese día. Me contaban también que durante un tiempo en la década de los años 50, el Día de la Madre se celebraba el 25 de diciembre.
No encontré sustentación jurídica sobre el particular, pero si así se hubiese celebrado por algún tiempo, me imagino que fue como un homenaje a nuestra madre María. No importa cómo rindamos homenaje a nuestras madres, lo importante es hacerlo. Ya sea en los centros de estudios, en nuestras casas, los que somos casados también debemos recordar que nuestras esposas también son madres y hay que homenajearlas. Y a los que ya no las tenemos físicamente, recordémoslas siempre con el ejemplo que ellas nos dieron. No importa el dinero, el regalo, lo realmente importante es demostrarles todo lo que significan para nosotros.
Dé a su madre en este día: un abrazo, un beso, una palabra. Dígale lo que ella significa para usted. Si tiene posibilidades económicas, pues llévele una serenata, a ellas les encanta. Mime y trate bien a su mamá no sólo este 30 de mayo, sino todos los días del año porque siempre son madres. Aparte del amor, si va a llevarle algo material, llévele algo que sea para que ella lo disfrute. De todos modos, celebre el Día de las Madres de la mejor manera posible y que ellas se sientan como lo que son: las reinas de nuestros corazones.
Felicidades madrecitas nicaragüenses en su día.
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