LUGO PIDE PERDÓN A PARAGUAY.

Presidente solícito. Fernando Lugo abraza a dos jóvenes periodistas, ayer, tras pedir perdón a los paraguayos por el escándalo de paternidad en el que se ha visto envuelto. /LA PRENSA/ AP/ J. SÁENZ

Pese a escándalo por tres reclamos de paternidad, el ex Obispo dice queconcluirá su mandato presidencial

“Asumiré todas las responsabilidades”, sostiene. Oposición no descarta juicio político en su contra
ASUNCIÓN / EFE
Piden su cabeza

El senador Alfredo Jaeggli, opositor al Gobierno, a pesar de pertenecer al oficialista Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), pidió a Lugo que renuncie al cargo a través de una nota difundida por los medios.
“Fue elegido considerando que su pasado garantizaba una alta credibilidad y se pensaba que se podría enderezar el rumbo del país. Su situación personal de hoy ha hecho que usted pierda toda credibilidad”, aseveró Jaeggli. Además, un sector del PLRA se considera marginado por el Presidente, principalmente la corriente que lidera el vicepresidente Federico Franco. Sobre las discrepancias con Franco, Lugo declaró que está tomando “los pasos necesarios” para recomponer los lazos.

El Presidente de Paraguay, el ex obispo Fernando Lugo, pidió perdón ayer por el escándalo, causado por las demandas presentadas por mujeres que dicen haber tenido hijos con él y aseguró que piensa cumplir los cinco años de mandato.

“De ninguna manera permitiré que estas circunstancias afecten en lo mínimo acciones de interés nacional, el ejercicio de los grandes planes y proyectos que marcan el paso de un Paraguay soñado por todos y todas”, afirmó Lugo en rueda de prensa.

El Presidente, que renunció a ser Obispo de San Pedro (centro de Paraguay), en diciembre del 2006, y afronta tres demandas de paternidad, pidió perdón a sus conciudadanos y les aseguró que su versión “será siempre la verdad” y que asumirá todas las responsabilidades que le correspondan.

“Yo, persona humana imperfecta, fruto de procesos históricos, perfil de mi cultura, asumiré con todas las responsabilidades presentes y futuras aquellas situaciones que me conciernen, no sólo con la actitud de respeto a la justicia o la verdad, sino con la multiplicación de afecto y atención”, afirmó.

El gobernante, que reconoció la semana pasada como su hijo a un niño de casi 2 años y afronta otras dos denuncias de paternidad, dijo que ha decidido responder a esta situación con prudencia, que, matizó, “no es lo mismo que ocultar información o eludirla”.

En cuanto a las burlas, que han motivado el escándalo en la prensa y en la población, el jefe de Estado señaló que “la caracterización” que se hace de su persona no se ajusta a su actitud, según él, “siempre dispuesta a servir y compartir”.

Sostuvo, además, que se trata de su vida privada. “La confesión la hago con mis confesores”, señaló el ex Obispo, al que el Vaticano redujo al estado laico en julio de 2008.

“En todo lo que haga, que atañe a mi vida privada, en estos espacios serán administrados estrictamente siguiendo tres criterios, la colaboración con la justicia, la verdad hasta el final y en tercer lugar, mi abogado será su interlocutor en estos casos ante la justicia y la prensa”, dijo.

Tras subrayar que tiene la intención de cumplir con su mandato, iniciado el 15 de agosto del 2008 y que concluirá en 2013, anunció que promoverá “una dramática protección de esfuerzos de todas las cuestiones relativas a la maternidad, niñez, mujer”, en el enfoque de las acciones de gobierno.

El escándalo que afronta ha abierto un debate sobre el riesgo de que sea sometido a juicio político.