¡A CENAR!!! Por Leonor Izquierdo.

LA PRENSA

Estamos cerca de Nochebuena y todos se preparan para la cena del 24, y es precisamente sobre la palabra cena que quiero hablarles hoy.

Debemos comenzar diciendo que entre los antiguos romanos la comida principal era al ponerse el sol, después de haber concluido las tareas o trabajos, pues durante el día sólo tomaban un bocado, un almuerzo (mordisco), que permitiera sostenerse hasta la cena, comida principal, así denominada porque se hacia en común, en familia.

Esta cena correspondía, por la hora en que se hacía con el díner (antiguamente disner) del francés, en catalán y en valenciano diñar, que en castellano es comer, hacer la comida principal, más o menos entrada la tarde.

Algunos afirman que díner y diñar vienen del verbo griego dipnein, que es comer, cenar, hacer la cena, pero otros consideran que procede del bajo latín dignerium, disnerium, disnarium, corrupción de dignare, voz con que empieza la oración Dignare, Domine, que se decía al sentarse a la mesa.

El cenáculo significó primeramente el sitio destinado para cenar, la sala de comer, el comedor (como se usa ahora). Recordemos que Cristo realizó la última cena en el cenáculo.

Las casas de los antiguos romanos tenían dos pisos, era arriba donde ingerían sus alimentos, en el cenadero. Con el paso del tiempo llamaron por extensión ccenacula a todas las piezas de la habitación superior.

Con comida pasa algo curioso, es una palabra polisémica que lo mismo designa la ingesta del alimento como el propio alimento. Comer deriva del latín edere, acción que se hace por lo general en compañía.

Yantar viene del latín ientare (almorzar) al inicio sólo se aplicaba a la comida del mediodía, pero ha devenido a cualquier ingesta.

El desayuno (su prefijo des, nos indica que rompe el ayuno) es la primera ingesta del día, una comida matutina ligera. El almuerzo es la comida del mediodía y la cena es la última del día, que en los antiguos romanos hacían después de las tres de la tarde.

Merendar viene del latín merenda, que quería decir: lo que se merece. Esto nos hace pensar en un estímulo, un premio. Tal vez por eso a los niños les gusta la merienda porque lleva chucherías, dulces, jugos.

Como ven cena y comida se refiere al mismo tiempo de comida, es la última ingesta del día, la cual unos realizan más temprano y otros más tarde, según sus ocupaciones. Usted la puede llamar como le plazca e incluir en ella lo que pueda comer según su salud y su bolsillo.